Málaga con sones Navideños

                                                 


                                                 Escena Quinta






UNA GITANA EN BELÉN

Una linda gitanilla

ha llegado hasta Belén,

a echar la buenaventura

a María y a José

y a este Niño tan precioso

que ha acabado de nacer.

GITANILLA:

Buenas noches, buena gente

muy buenas aunque muy frías;

yo soy Sara la gitana.
 

la que lleva cada día

por los pueblos y ciudades,

cantes, bailes y alegrías.
 

En las rayas de la mano

yo leo con claridad,

las cosillas que han pasado,

las que tienen que pasar.
 

Las malas, las regulares,

las alegrías, las penas,

las malas me las reservo,

yo solo digo las buenas.
 

A ver carita de rosa

vaya niño,!que hermosura!.

Esto merece que os diga

a tos la buenaventura.
 

Dame la mano mi arma

que tienes cara de santo,

con esas barbas tan largas

que te tien que picar tanto.
 

!Ojú que mano tan dura!

parece la de un obrero,

yo diría que esta mano

pertenece a un carpintero.
 

A ver, déjame que mire...

!Por Dios que barbaridad!

Te estoy viendo mu clarito

en lo alto de un altar.
 

Serás patrón de los padres,

por ser un padre fetén

y te llamarán bendito,

el bendito San José.

Y ahora a ti cacho de cielo,

rosita de Alejandría,

estrella de la mañana,

dame esa mano arma mía

que te voy a predecir

to lo que te va a pasar.
 

Pero, qué miran mis ojos

¿me habré vuelto yo chalá?

Jamás en toda mi vida

he visto una mano igual.
 

No nacerá otra criatura

que se te pueda igualar.


Después de Dios ,en la tierra

en el cielo reinarás.
 

Todas las generaciones

ante Ti se inclinarán.
 

Serás la madre, la reina

y luz de la humanidad.
 

Serás su faro y su guía,

serás consuelo y amor,

serás la Virgen María,

serás la madre de Dios.
 

Y a Ti, Salvador del mundo

qué te puede adivinar

esta pobre gitanilla

que no lo sepas Tú ya.
 

Bendito seas mil veces

por dejarme contemplar,

la noche más importante

de toda la humanidad.
 

!Que se asomen las estrellas,

conviertan la noche en día,

porque el salvador del mundo

ha nacido de María.!

José Antº Párraga Rivas